También en Alema­nia se produ­cen casi todos los años incen­dios fores­ta­les y de pára­mos de gran magni­tud que duran varios días. Son bastante arries­ga­dos para los servi­cios de emer­gen­cia, como demues­tran los nume­ro­sos (casi) acci­den­tes, vícti­mas y pérdi­das de vehícu­los de emer­gen­cia de los últi­mos años. A menudo se subes­tima el peli­gro para el entorno o los servi­cios de emer­gen­cia o el riesgo de propa­ga­ción, así como las nece­si­da­des de perso­nal, técni­cas y de tiempo. Casi cual­quier fuego en un entorno seco e infla­ma­ble puede conver­tirse en un incen­dio a gran escala con rela­tiva rapi­dez bajo la influen­cia del viento, el entorno o la falta de medios de extin­ción. En parte, falta tecno­lo­gía adecuada (vehícu­los y equi­pos). Depen­diendo del clima y de la vege­ta­ción, existe el riesgo de que se produzca un retro­ceso, a veces durante sema­nas. Para este libro se han reco­gido y evaluado las expe­rien­cias opera­ti­vas adqui­ri­das en muchos luga­res. De este modo, se ponen de mani­fiesto los puntos débi­les y peli­gro­sos típi­cos. ¿Cuáles son las conse­cuen­cias para la elec­ción del equipo y las tácti­cas opera­ti­vas? ¿Qué puede hacer el jefe de opera­cio­nes de forma preven­tiva? Hay respues­tas claras y satu­ra­das de expe­rien­cia al respecto.